Autor: Planeta Joven
27 febrero, 2020

Partiendo de la base de definir la creatividad como la competencia de las competencias, Antonio Sánchez y Patrocinio Lorente nos sumergen en la propuesta de un aprendizaje en el que todas las competencias estén integradas. En el que, por ejemplo, una expresión artística como la danza pueda estar integrada con la competencia matemática.

Antonio Sánchez es director y profesor del centro rural de innovación educativa, del CRIE de Zamora, Patrocinio Lorente lleva una década como docente en el CES Vega Media de Alguazas, Murcia. Ambos viven una realidad compartida en la que incorporar la creatividad en el aprendizaje resulta capital para conseguir reconducir una situación anclada en “lo de siempre”.

Tanto Antonio como Patrocinio centran sus empeños en transmitir por delante del resto de competencias la social y ciudadana, a la que consideran la clave para incorporar el resto de competencias en sus entornos, y lo hacen a través de la creatividad.

Algunas personas parecen llevar incorporada esa capacidad creativa. Podríamos decir que en realidad lo que les pasa es que no la han perdido con el paso a la madurez. En cualquier caso, recuperarla es siempre posible.

Una de las cosas más interesantes de este giro en el modo de plantear la docencia es que todo está a disposición de los profesores y profesoras: el baile, el salto, la música, la pintura, la escultura.

En las jornadas de Acción Magistral, patrocinio y Antonio plantearon un taller en el que se partía de la búsqueda de ideas, y el resultado final fue una escultura. Esto es posible sólo con la incorporación de la creatividad al trabajo.

La competencia social y ciudadana no debería ser únicamente una vocación docente sino algo que aprender por parte de toda la sociedad. Sin embargo, aún hay muchas personas que no consideran fundamental desarrollar su aprendizaje en la escuela.

Es bien conocido que ante cualquier cambio hay resistencias, lo importante es valorar si el cambio merecerá la pena y si mantener el estado de cosas hace que haya avances. Con la suma de esas dos reflexiones lo más seguro es que decidamos abrir el paso al planeta de las ideas creativas.